La Tecnología en las aulas.
Tecnologías y su aplicación didáctica a la clase de
literatura, entendiéndola en el más amplio sentido del término pues lo que
propongo puede aplicarse a cualquier asignatura relacionada con la materia
general y a cualquier nivel académico. Tras una breve introducción a la
utilidad didáctica de algunos de los últimos avances tecnológicos, expongo una serie
de actividades útiles y practicables que el profesor de literatura puede
realizar con los diversos medios que tiene a su alcance, básicamente, agrupo
estos ejercicios en tres bloques diferentes: medios audiovisuales, el uso del
ordenador personal y las posibilidades que Internet ofrece a los estudiantes de
literatura. Como medios audiovisuales, en clase de literatura podemos recurrir
al reproductor de sonido, bien en formato cassettes bien como CD, para oír
música. En ocasiones se trata de música ambiental, relacionada de alguna manera
con la época o el lugar que sirven como contexto al autor o texto literario que
se estudie. El ordenador se ha convertido, sin duda, en elemento imprescindible
en el proceso de enseñanza-aprendizaje de muchas
asignaturas relacionadas con la ciencia y la tecnología. En el campo de las humanidades, y en el caso concreto de la literatura, el ordenador se utilizará, principalmente, para actividades concretas y puntuales como la elaboración de trabajos escritos, la preparación de presentaciones orales, etc. Internet es una ventana al mundo de la información que, desde luego, resulta imprescindible conocer hoy en día. Para el estudiante de literatura, Internet aporta innumerables posibilidades relacionadas con su campo de estudio, ya que le permite acceder a catálogos de bibliotecas, revistas electrónicas, páginas especializadas en las épocas o autores que estudie e incluso la lectura de textos originales y completos desde el monitor de su ordenador. El correo electrónico facilita la comunicación directa entre los alumnos y el profesor, quien obtiene así un seguimiento mayor y más individualizado de la evolución y el trabajo de sus alumnos.
Tecnología y educación
El impacto de la tecnología en el proceso educativo ha generado una diversidad de enfoques y conceptos que demuestran el grado de interacción y dinamismo de dicho impacto. Veamos un par de enfoques relacionados a este impacto:
· Muffoletto, 1994: Generalmente se piensa en la tecnología en función de aparatos, instrumentos, máquinas y dispositivos... la mayoría de los/as educadores/as se refieren a las computadoras cuando hablan de tecnología. La tecnología no es una colección de máquinas y dispositivos, sino una forma de actuar.
· Saettler, 1990: La función histórica de la tecnología educativa es un proceso más que un producto. Una distinción precisa se debe hacer siempre entre el proceso de desarrollar una tecnología de la educación y el uso de ciertos productos o medios dentro de una tecnología de la instrucción particular, sin importar cuan sofisticado se vuelva el medio de la instrucción. Una definición de tecnología educativa debe enfocarse en la aplicación de herramientas para propósitos educativos, al igual que las herramientas y materiales que se usan.
Las expresiones “una forma de actuar” y “desarrollar una tecnología de la educación” implican que deben existir guías, metodologías, procedimientos, justificaciones, etc. para poder integrar la tecnología a la sala de clases. Entonces, estos enfoques proponen a la tecnología como una filosofía; como un proceso que debe planificarse para asegurar el éxito del proceso instruccional.
Perspectivas educativas de la tecnología
La perspectiva del impacto de la tecnología en la educación ha variado con el transcurso del tiempo y las herramientas tecnológicas disponibles a el/la educador/a. Básicamente, la visión de la tecnología en la educación se ha planteado como:
· El uso de medios audiovisuales como recurso para mejorar la instrucción
En sus principios, se enfatizaba la tecnología como un medio. Esta postura plantea que los medios audiovisuales permiten la transferencia de información a los/as estudiantes de una forma más concreta y efectiva.
Saettler (1990) lo llamó el movimiento audiovisual: formas alternas a la conferencia y los libros para transferir información. Esto incluye el uso de diapositivas, transparencias y el uso de grabaciones fílmicas.
Luego se desarrolló en un campo llamado comunicaciones audiovisuales, la rama de la educación teórica y práctica relacionada principalmente con el diseño y uso de mensajes que controlan el proceso de aprendizaje.
· La incorporación de la teoría sobre sistemas a los procesos instruccionales
El advenimiento del diseño instruccional y los sistemas de instrucción perciben la tecnología como un enfoque sistemático para diseñar, desarrollar e implantar la instrucción, con el fin de satisfacer necesidades instruccionales cuidadosamente identificadas. (Heinich, Molenda and Russell, 1996)
Este enfoque se fundamenta en la creencia de que los recursos humanos(los/as educadores/as) y los no humanos (medios) forman parte de un sistema para atender las necesidades instruccionales.
Desde los 1960’s a los 1980’s, la aplicación de los enfoques de las teorías de sistemas al proceso instruccional recibió una gran influencia de las teorías de aprendizaje de la psicología educativa.
· Herramienta para adiestramiento vocacional
Esta perspectiva implica que la tecnología se usa como herramienta en los negocios y en la industria. Surge de la premisa de que los/as estudiantes deben prepararse para el mundo del trabajo y que el adiestramiento vocacional puede ser un medio práctico para el aprendizaje de asignaturas tradicionales: matemáticas, ciencias y lenguajes.
Esta visión de la educación tecnológica se inició con adiestradores/as de la industria y educadores/as vocacionales y refleja la necesidad de la tecnología para mejorar la capacitación en destrezas de trabajo específicas.
· El uso de sistemas de computadoras
Esta visión se ha generado debido a la evolución que han alcanzado las nuevas tecnologías de la información y a la percepción de los sistemas de computadora como una combinación de medios que le ofrecen apoyo al proceso instruccional.
El surgimiento y uso de los sistemas de computadoras en la educación originó lo que se llamó computación educativa (1960-1990). Este enfoque consideraba tanto el uso instruccional y de apoyo de los sistemas de computadoras. Inicialmente, este enfoque recibió una gran influencia de personal técnico: programadores/as y analistas de sistemas.
Desde los años 70, los/as educadores/as involucrados en el uso de medios en el proceso instruccional dirigieron sus esfuerzos a la investigación y el desarrollo de la computación educativa.
Para 1990, los educadores vieron los sistemas de computadora como parte de una combinación de recursos tecnológicos: medios, sistemas de instrucción y sistemas de apoyo basados en computadoras. La computación educativa se convirtió en tecnología educativa.
En la educación, la combinación de procesos y productos entrelaza los procedimientos instruccionales con las herramientas instruccionales. Para los procesos instruccionales, las guías para la aplicación de las herramientas provienen de las teorías de aprendizaje fundamentadas en las ciencias del comportamiento humano
asignaturas relacionadas con la ciencia y la tecnología. En el campo de las humanidades, y en el caso concreto de la literatura, el ordenador se utilizará, principalmente, para actividades concretas y puntuales como la elaboración de trabajos escritos, la preparación de presentaciones orales, etc. Internet es una ventana al mundo de la información que, desde luego, resulta imprescindible conocer hoy en día. Para el estudiante de literatura, Internet aporta innumerables posibilidades relacionadas con su campo de estudio, ya que le permite acceder a catálogos de bibliotecas, revistas electrónicas, páginas especializadas en las épocas o autores que estudie e incluso la lectura de textos originales y completos desde el monitor de su ordenador. El correo electrónico facilita la comunicación directa entre los alumnos y el profesor, quien obtiene así un seguimiento mayor y más individualizado de la evolución y el trabajo de sus alumnos.
Tecnología y educación
El impacto de la tecnología en el proceso educativo ha generado una diversidad de enfoques y conceptos que demuestran el grado de interacción y dinamismo de dicho impacto. Veamos un par de enfoques relacionados a este impacto:
· Muffoletto, 1994: Generalmente se piensa en la tecnología en función de aparatos, instrumentos, máquinas y dispositivos... la mayoría de los/as educadores/as se refieren a las computadoras cuando hablan de tecnología. La tecnología no es una colección de máquinas y dispositivos, sino una forma de actuar.
· Saettler, 1990: La función histórica de la tecnología educativa es un proceso más que un producto. Una distinción precisa se debe hacer siempre entre el proceso de desarrollar una tecnología de la educación y el uso de ciertos productos o medios dentro de una tecnología de la instrucción particular, sin importar cuan sofisticado se vuelva el medio de la instrucción. Una definición de tecnología educativa debe enfocarse en la aplicación de herramientas para propósitos educativos, al igual que las herramientas y materiales que se usan.
Las expresiones “una forma de actuar” y “desarrollar una tecnología de la educación” implican que deben existir guías, metodologías, procedimientos, justificaciones, etc. para poder integrar la tecnología a la sala de clases. Entonces, estos enfoques proponen a la tecnología como una filosofía; como un proceso que debe planificarse para asegurar el éxito del proceso instruccional.
Perspectivas educativas de la tecnología
La perspectiva del impacto de la tecnología en la educación ha variado con el transcurso del tiempo y las herramientas tecnológicas disponibles a el/la educador/a. Básicamente, la visión de la tecnología en la educación se ha planteado como:
· El uso de medios audiovisuales como recurso para mejorar la instrucción
En sus principios, se enfatizaba la tecnología como un medio. Esta postura plantea que los medios audiovisuales permiten la transferencia de información a los/as estudiantes de una forma más concreta y efectiva.
Saettler (1990) lo llamó el movimiento audiovisual: formas alternas a la conferencia y los libros para transferir información. Esto incluye el uso de diapositivas, transparencias y el uso de grabaciones fílmicas.
Luego se desarrolló en un campo llamado comunicaciones audiovisuales, la rama de la educación teórica y práctica relacionada principalmente con el diseño y uso de mensajes que controlan el proceso de aprendizaje.
· La incorporación de la teoría sobre sistemas a los procesos instruccionales
El advenimiento del diseño instruccional y los sistemas de instrucción perciben la tecnología como un enfoque sistemático para diseñar, desarrollar e implantar la instrucción, con el fin de satisfacer necesidades instruccionales cuidadosamente identificadas. (Heinich, Molenda and Russell, 1996)
Este enfoque se fundamenta en la creencia de que los recursos humanos(los/as educadores/as) y los no humanos (medios) forman parte de un sistema para atender las necesidades instruccionales.
Desde los 1960’s a los 1980’s, la aplicación de los enfoques de las teorías de sistemas al proceso instruccional recibió una gran influencia de las teorías de aprendizaje de la psicología educativa.
· Herramienta para adiestramiento vocacional
Esta perspectiva implica que la tecnología se usa como herramienta en los negocios y en la industria. Surge de la premisa de que los/as estudiantes deben prepararse para el mundo del trabajo y que el adiestramiento vocacional puede ser un medio práctico para el aprendizaje de asignaturas tradicionales: matemáticas, ciencias y lenguajes.
Esta visión de la educación tecnológica se inició con adiestradores/as de la industria y educadores/as vocacionales y refleja la necesidad de la tecnología para mejorar la capacitación en destrezas de trabajo específicas.
· El uso de sistemas de computadoras
Esta visión se ha generado debido a la evolución que han alcanzado las nuevas tecnologías de la información y a la percepción de los sistemas de computadora como una combinación de medios que le ofrecen apoyo al proceso instruccional.
El surgimiento y uso de los sistemas de computadoras en la educación originó lo que se llamó computación educativa (1960-1990). Este enfoque consideraba tanto el uso instruccional y de apoyo de los sistemas de computadoras. Inicialmente, este enfoque recibió una gran influencia de personal técnico: programadores/as y analistas de sistemas.
Desde los años 70, los/as educadores/as involucrados en el uso de medios en el proceso instruccional dirigieron sus esfuerzos a la investigación y el desarrollo de la computación educativa.
Para 1990, los educadores vieron los sistemas de computadora como parte de una combinación de recursos tecnológicos: medios, sistemas de instrucción y sistemas de apoyo basados en computadoras. La computación educativa se convirtió en tecnología educativa.
En la educación, la combinación de procesos y productos entrelaza los procedimientos instruccionales con las herramientas instruccionales. Para los procesos instruccionales, las guías para la aplicación de las herramientas provienen de las teorías de aprendizaje fundamentadas en las ciencias del comportamiento humano
La tecnología de la educación es la suma total de las
actividades que hacen que la persona modifique sus ambientes externos
(materiales) o internos (de comportamiento). Una aplicación sistemática de los
recursos del conocimiento científico del proceso que necesita cada individuo
para adquirir y utilizar los conocimientos.
Cuando superficialmente se habla de «nuevas tecnologías», estamos empleando incorrectamente un adjetivo, ya que lo nuevo lo confundimos con lo último, «el último grito en aplicación de técnicas». En tecnología de la educación, en primer lugar como hemos dicho en varias ocasiones, no hay que confundir máquinas o artefactos con aplicación de tecnologías, que tienen más que ver con la organización de medios y recursos que con los mismos medios. El recurso no tiene por qué pasar de moda, o ser utilizado mientras esta dure como es costumbre hacer. Un recurso puede ser eterno si la mente que lo utiliza posee la creatividad planificadora adecuada para hacerlo útil. El método socrático seguimos utilizándolo, con distintos contenidos, igual que usamos la pizarra, o el libro. Una enciclopedia en CD-ROM no pierde su carácter de enciclopedia; lo que cambia es su forma de utilización, la facilidad y velocidad en el manejo, la calidad, movilidad y sonorización de sus ilustraciones.
La infusión de tecnología a la sala de clases ofrece a los/las educadores/as la oportunidad de diseñar experiencias instruccionales encaminadas a explorar, crear y desarrollar al máximo su potencial profesional y el de sus estudiantes. Para lograr esto, el/la educador/a debe utilizar una combinación de estrategias y metodologías efectivas que le permitan dicha infusión en sus prácticas diarias en la sala de clases. El proceso de infusión debe ser el resultado de un sistema de planificación que contemple los siguientes principios:
1. La tecnología es una herramienta de apoyo al proceso instruccional, por lo que se debe convertir en un elemento transparente del proceso. La tecnología no debe ser el centro de atención hacia donde se enfoque el/la aprendiz, sino el medio a través del cual ocurre el intercambio de información durante el proceso instruccional.
2. La infusión de tecnología permite diversificar el proceso de enseñanza-aprendizaje. Los medios incluidos en las tecnologías asociadas a los sistemas computadorizados permiten diseñar, desarrollar e implantar una variedad de actividades que enriquecen el proceso educativo.
3. La infusión de tecnología atiende las necesidades instruccionales del maestro y del aprendiz. El uso de la tecnología debe estar enmarcado en la necesidad común de el/la educador/a y el/la estudiante: lograr que el proceso instruccional se desarrolle dentro de un ambiente que propicie el éxito para ambos.
4. Los métodos de infusión se fundamentan en las teorías de aprendizaje y las prácticas de enseñanza. El proceso de infusión de tecnologías computadorizadas debe considerar y armonizar los estilos de enseñanza de los/las educadores/as y los estilos de aprendizaje de los/las estudiantes para que el proceso sea efectivo.
Este proceso de planificación para integrar tecnología requiere de una gran inversión de tiempo y recursos. Su propósito fundamental estriba en lograr un plan que permita obtener el máximo de los beneficios del potencial que una cierta tecnología puede proveer. La preparación de un plan de infusión implica investigar sobre diversos productos y servicios, reuniones para discutir opciones y tomar decisiones, documentar los hallazgos de la investigación y establecer una comunicación entre los componentes del equipo de redacción del plan.
Cuando superficialmente se habla de «nuevas tecnologías», estamos empleando incorrectamente un adjetivo, ya que lo nuevo lo confundimos con lo último, «el último grito en aplicación de técnicas». En tecnología de la educación, en primer lugar como hemos dicho en varias ocasiones, no hay que confundir máquinas o artefactos con aplicación de tecnologías, que tienen más que ver con la organización de medios y recursos que con los mismos medios. El recurso no tiene por qué pasar de moda, o ser utilizado mientras esta dure como es costumbre hacer. Un recurso puede ser eterno si la mente que lo utiliza posee la creatividad planificadora adecuada para hacerlo útil. El método socrático seguimos utilizándolo, con distintos contenidos, igual que usamos la pizarra, o el libro. Una enciclopedia en CD-ROM no pierde su carácter de enciclopedia; lo que cambia es su forma de utilización, la facilidad y velocidad en el manejo, la calidad, movilidad y sonorización de sus ilustraciones.
La infusión de tecnología a la sala de clases ofrece a los/las educadores/as la oportunidad de diseñar experiencias instruccionales encaminadas a explorar, crear y desarrollar al máximo su potencial profesional y el de sus estudiantes. Para lograr esto, el/la educador/a debe utilizar una combinación de estrategias y metodologías efectivas que le permitan dicha infusión en sus prácticas diarias en la sala de clases. El proceso de infusión debe ser el resultado de un sistema de planificación que contemple los siguientes principios:
1. La tecnología es una herramienta de apoyo al proceso instruccional, por lo que se debe convertir en un elemento transparente del proceso. La tecnología no debe ser el centro de atención hacia donde se enfoque el/la aprendiz, sino el medio a través del cual ocurre el intercambio de información durante el proceso instruccional.
2. La infusión de tecnología permite diversificar el proceso de enseñanza-aprendizaje. Los medios incluidos en las tecnologías asociadas a los sistemas computadorizados permiten diseñar, desarrollar e implantar una variedad de actividades que enriquecen el proceso educativo.
3. La infusión de tecnología atiende las necesidades instruccionales del maestro y del aprendiz. El uso de la tecnología debe estar enmarcado en la necesidad común de el/la educador/a y el/la estudiante: lograr que el proceso instruccional se desarrolle dentro de un ambiente que propicie el éxito para ambos.
4. Los métodos de infusión se fundamentan en las teorías de aprendizaje y las prácticas de enseñanza. El proceso de infusión de tecnologías computadorizadas debe considerar y armonizar los estilos de enseñanza de los/las educadores/as y los estilos de aprendizaje de los/las estudiantes para que el proceso sea efectivo.
Este proceso de planificación para integrar tecnología requiere de una gran inversión de tiempo y recursos. Su propósito fundamental estriba en lograr un plan que permita obtener el máximo de los beneficios del potencial que una cierta tecnología puede proveer. La preparación de un plan de infusión implica investigar sobre diversos productos y servicios, reuniones para discutir opciones y tomar decisiones, documentar los hallazgos de la investigación y establecer una comunicación entre los componentes del equipo de redacción del plan.
La sociedad de la información es una realidad que transforma
el modo en que vivimos, nos divertimos, se comercializa, interactuamos y
estudiamos. Lo que en un principio era el comienzo de un régimen económico, hoy
en día se ha convertido en la necesidad global “la tecnología”. La forma de
comunicación actual se creó y se utiliza masivamente por los jóvenes, "la
nueva era". Lo que en un tiempo reducía costos y se creía como economía
del lenguaje en pos de acortar la escritura y la comunicación del hombre de
hoy, se ha convertido en el lenguaje de los medios electrónicos; la Internet,
el celular, estos son algunos ejemplos de los muchos existentes que dan pie a
la nueva sociedad de información y consumo. Creo que es una rápida y muy
divertida forma de comunicación; artículos donde sociólogos exponen, se opina
de manera puntual que la razón del uso de este vocabulario va más allá del
tiempo y el dinero; tiene que ver con una necesidad de crear un universo
propio, único, donde los adultos no tengan acceso y que incluso podría llegar a
enriquecer la comunicación. A través del desarrollo de la tecnología, los
docentes participantes podrán conocer los diferentes medios, sus tecnologías y
ejemplos de sus aplicaciones didácticas; e identificarán los elementos teóricos
que justifican la incorporación de la tecnología al aula a través de propuestas
metodológicas donde existe la convergencia de medios. La incorporación de la
tecnología en la educación está ya vigente y forma par-te del reto de
actualización de los maestros. Cuando vamos incorporando recursos tecnológicos
a nuestra práctica docente, el énfasis casi siempre lo ponemos en el aspecto
instruccional. La forma y el contenido nos demandan particular atención. Orden
en la secuencia de presentación, conceptos relevantes, vista agradable, apego a
los objetivos que se desean cumplir, entre otros. Perfecto, eso mismo justifica
el empleo de herramientas en el salón de clase. La máquina no es la que enseña,
sino que somos nosotros y nuestros estudiantes los que seguimos siendo
protagonistas del complejo proceso que implica aprender. Sin embargo, hay
cuestiones instrumentales que también debemos planear al emplear la tecnología.
Androide
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Este artículo
trata sobre el robot u organismo sintetico. Para el sistema operativo movil,
véase Android.
Androide es la denominación que se le da a un robot antropomorfo
que, además de imitar la apariencia humana, imita algunos aspectos de su conducta
de manera autónoma. Es un término mencionado por primera vez por Alberto
Magno en 1270 y popularizado por el autor francés Auguste Villiers en su novela de
1886 L'Ève future. Etimológicamente "androide" se refiere a
los robots humanoides de fisionomía masculina, a los robots de apariencia femenina se
les llama ocasionalmente ginoides, principalmente en las obras de ciencia
ficción, aunque en el lenguaje coloquial el término androide suele usarse
para ambos casos...
Androides en
la cultura popular
Robot ASIMO de
Honda.
Un robot humanoide que se limita a imitar los actos y
gestos de un controlador humano, no es visto por el público como un verdadero
androide, sino como una simple marioneta animatrónica.
El androide siempre ha sido representado como una entidad que imita al
ser humano tanto en apariencia, como en capacidad mental e iniciativa. Antes
incluso de haber visto un verdadero robot en acción, la mayoría de las personas
asocian la idea de robot con la de androide, debido a su extrema popularidad
como cliché
de la ciencia ficción.
La actitud de
base entre el público frente a los androides varía en función del bagaje
cultural que posea dicho público. En la cultura occidental la criatura humanoide,
fabricada casi siempre por un sabio, es con bastante frecuencia un monstruo que se
rebela contra su creador y en ocasiones lo destruye como castigo por su hubris; y el
primero de los cuales no es necesariamente el monstruo de Frankenstein
de Mary
Shelley. Bien que dicho monstruo sea fácilmente el más famoso.
Desde los Grecia
Antigua existen leyendas y folklore narrando sobre seres humanoides
fabricados en metal por el artesano y herrero de los dioses, Hefesto. Aunque
el carácter monstruoso del androide parece haberse ganado con la
cristianización del mundo occidental.
De hecho es tan
notorio este fenómeno, que el reconocido experto en inteligencia artificial Marvin
Minsky, llegó a narrar como en ocasiones llegaba a sentirse incómodo frente
a una de sus creaciones, el androide Cog, cuando éste presentaba conductas inesperadas.
En otras culturas
las reacciones pueden ser bastante diferentes. Un ejemplo meritorio es la
actitud japonesa
de cara a los androides, donde el público no teme la antropomorfización de las
máquinas, y aceptan por lo tanto con menos problemas la idea que un robot tenga
apariencia humana, para poder así interactuar más fácilmente con seres humanos.
Androides en
la ciencia
En la robótica
la actitud de los expertos hacia los autómatas humanoides ha vacilado entre el
entusiasmo y el escepticismo. Entusiasmo porque un robot humanoide puede tener
enormes ventajas para cierta clase de funciones, escepticismo debido a que para
que una máquina robótica sea útil, ya se ha demostrado con ejemplos que la
forma humana no es necesaria, y a veces es incluso un estorbo (respecto a las
capacidades actuales de los androides).
La construcción
de un robot que imite convincentemente aunque sea una parte ínfima de la
libertad de gestos y movimiento humanos, es una tarea de una enorme complejidad
técnica. De hecho, es un problema que en varias instancias está todavía abierto
a la investigación y a la mejora, aunque ya existen varios ejemplos bastante
meritorios en ese sentido, de robots humanoides que imitan ciertas conductas y
capacidades humanas. Un ejemplo conocido en este sentido, es el robot Asimo de Honda, que es capaz de marchar en dos pies,
de subir y bajar escaleras y de otra serie de proezas de locomoción
bípeda.
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